jueves, 1 de septiembre de 2011

Instituto de Sordos - Riobamba






Jueves 20 de Enero de 2011.
Al igual que en la primera visita, esta vez en Riobamba cumplimos todos los objetivos propuestos de integración e intercambio de conocimiento en cuanto al vocabulario, en esta ocasión los chicos estuvieron más tímidos pero después se sientieron motivados y se mostraron interesados en involucrarse en expericiencias similares a las del Coro del Silencio. 
Descubrimos que existen muchas más diferencias en cuanto a las señas usadas en relación a la ocasión anterior, mas estos encuentros contribuyen a la unificación de las lenguas de señas a nivel nacional y y demuestran las importancia de crear mas espacios donde puedan encontrarse, compartir, debatir y crear.    


El Coro del Silencio en Ibarra

El Coro del Silencio viaja a Ibarra con el objetivo de visitar la Unidad Educativa de Sordos del Gobierno Provincial de Imbabura. 
Allí se llevó a cabo una programación para compartir con la comunidad sorda, las cuales fueron de gran interés de parte de las dos agrupaciones de sordos. Los parcipantes del Coro del Silencio fueron quienes dirigeron el encuentro con diferentes actividades de integración, realizaron una muestra visual con material audiovisual y escritos de apoyo, con el fin de animarlos a expresarse libremente, a crear sus propios materiales creativos y a estar orgullosos de su lengua natural, la lengua de señas.

La experiencia demostró que existe diferencia de vocabulario entre Quito e Ibarra, por lo que consideramos imporante encuentros más frecuentes entre sordos de distintas provincias del País.








Visita del Coro del Silencio a la USFQ








El día viernes 10 de Diciembre de 2010, El Coro del Silencio visitamos la USFQ, donde vivimos una experiencia muy enriquecedora ya que tuvimos la oportunidad de conocer el estudio de audio donde logramos percibir las vibraciones del sonido a través de observar y sentir vibraciones de un piano. Descubrimos que con el uso de bajas frecuencias en alto volumen, nos permite percibir el sonido como vibraciones, logrando que nosotros seamos capaces de llevar el ritmo, es decir, poder movernos al ritmo del sonido de la misma manera que lo hacen los oyentes.